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29.ENERO. 2001 (08:15 Hrs) de RpR/Costa Rica
Candidatos Un psiquiatra, un ingeniero y un economista figuran como los más firmes aspirantes a la presidencia de Costa Rica para las elecciones del domingo en una campaña en la que la ética en la función pública ha ocupado un lugar destacado. Abel Pacheco, psiquiatra y líder del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC, en el poder), Rolando Araya, ingeniero y candidato del socialdemócrata Partido Liberación Nacional (PLN) y el economista Ottón Solís, del emergente Partido Acción Ciudadana (PAC) son los aspirantes con más posibilidades de llegar a la presidencia en las elecciones del próximo domingo. Pacheco, de 68 años y graduado en México, ha seducido a amplios sectores de la población con un lenguaje popular, que apela, una y otra vez, a frases fáciles y de gran arraigo en el alma del pueblo. "La necesidad tiene cara de caballo", "soy amigable y afable, pero el pueblo ha sido testigo de que cuando las cosas no están bien, yo me paro en seco", y "los sabios en economía han hundido al país", conforman parte del discurso de Pacheco. Las encuestas realizadas por las empresas Unimer, Cid-Gallup y Demoscopía le dan la razón a su estrategia de campaña, pues mantiene una ligera ventaja. Pacheco, que procura aparecer como muy cercano a los electores, gusta de resaltar que en su vida ha sido comentarista de televisión, labor que desempeñó durante 25 años, comerciante, escritor, poeta y actual diputado. No es extraño que en una entrevista, en una plaza pública o simplemente en una conversación informal, sorprenda a sus interlocutores con frases como: "soy un poeta conectado a tierra". Por el contrario, Araya, de 54 años, se presenta como un intelectual de sólida formación y con plena experiencia para gobernar a los costarricenses. Ex ministro de Obras Públicas y Transportes, ex diputado y actual vicepresidente de la Internacional Socialista, Araya sustenta su mensaje en que es un hombre de estado y que tiene el respaldo de un Partido formado hace ya más de medio siglo. Con Pacheco comparte solo la experiencia de haber sido comentarista de televisión. Igual que el socialcristiano, acostumbraba analizar, en dos minutos, los más variados asuntos. Araya resalta su trayectoria como profesor universitario, su conocimiento profundo de la política costarricense y su pasión por los temas sociales. La protección a la agricultura y el fortalecimiento de la educación para las nuevas generaciones son dos de las principales propuestas que sostienen su campaña. En la recta final de la contienda, sin embargo, la estrategia del PLN procura no dejar visible a su candidato, para destacar las virtudes del partido. "Los mejores años de nuestra nación, los hizo mi pueblo con Liberación", dice uno de los eslóganes. Solís, de 47 años, se ha convertido en el fenómeno político de esta contienda electoral: en poco más de un año fundó el PAC y agrupó a miles de seguidores, que, según analistas, muestran de esta manera su descontento con el bipartidismo. "Están cansados de las falsas promesas, del bipartidismo petrificado y de la gangrena de la corrupción que parece no tener fin", aseguró a EFE Rodrigo Madrigal, catedrático de la Universidad de Costa Rica. Ministro de planificación en el Gobierno de Oscar Arias, premio Nobel de la Paz, a los 31 años y diputado entre 1994-98 con el PLN, el que luego abandonó, Solís transmite una imagen de intelectual puro y una estrategia de campaña basada en la ética en la función pública. La necesidad de volver a la política de ideas, de respeto y honrada, llevaron a Solís a fundar el PAC, según afirma. Para romper con los esquemas tradicionales, Solís no realiza las denominadas plazas públicas como sí lo hacen sus adversarios, sino "encuentros ciudadanos", en los que los asistentes plantean preguntas directas que él responde. Graduado en economía en la Universidad de Costa Rica y con una maestría en la Universidad de Manchester (Reino Unido), Solís apuesta por un Estado en el que es "imprescindible" mejorar la función pública y asegurar una protección absoluta de los agricultores. El surgimiento de Solís le ha dado a la campaña un matiz diferente, al extremo de que no se descarta una segunda ronda electoral, el 7 de abril, en caso de que ninguno alcance el mínimo del 40 por ciento de los votos en la primera vuelta. Acan-efe. Donaldo Fonseca.
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